Ugaitz Cascales, dispuesto a noquear a la mala suerte
|TRAS SUPERAR UN PROBLEMA QUE LE AFECTABA LA VISIÓN, EL CAMPEÓN DE EUSKADI DEL LIGERO EN 2011 Y 2012 SE RECUPERA DE UN NERVIO SECCIONADO EN SU MANO DERECHA
Ya sea en el peso mosca o en el pesado, en categoría olímpica o en profesional, en ocasiones no hay enemigo más duro que la propia suerte. Lo ha comprobado durante 2014 Ugaitz Cascales (Basauri, Bizkaia, 1987). El dos veces campeón autonómico del ligero ha peleado durante largos meses contra un problema de visión que le generaba dificultades y contra el que solo cabía el reposo de la competición. Cuando, en las últimas semanas de 2014, el impedimento empezaba a estar encarrilado, el bravo boxeador sufrió otro contratiempo.
El 21 de noviembre tropezó en una calle de Bilbao, al caer puso la mano derecha sobre un cristal. Al principio parecía un corte sin más. Dos puntos en la casa de socorro y listo. Pero el 5 de diciembre Cascales tuvo que ser operado en el Hospital de Galdakao para restaurar el nervio del pulgar de su mano que había sido seccionado por el vidrio.
«Aún tengo una parte del dedo sin sensibilidad y me han dicho que tardaré en recuperarla completamente, pero ya estoy entrenando. Voy a correr y hago sombra», explica un Cascales que quiere volver al ring cuanto antes.
«Para finales de febrero estaré peleando. Ya verás», anuncia.
A la mala suerte ya le pueden ir haciendo la cuenta.